NOTICIA DE ÚLTIMA HORA: Tom Cruise ha acaparado recientemente los titulares por una polémica decisión relacionada con su hija, Suri Cruise. La joven de 18 años se graduó de LaGuardia High School el pasado 21 de junio, pero lo hizo sin la presencia de su padre. En su lugar, Cruise eligió asistir al concierto de la gira Eras de Taylor Swift en Londres, lo que ha desatado una ola de críticas y cuestionamientos sobre sus prioridades y su vínculo con su hija.
Suri Cruise, quien según informes habría cambiado su apellido a Noelle en honor a su madre Katie Holmes, celebró este importante momento con el apoyo de su madre. Katie estuvo allí para acompañar y festejar junto a su hija, pero la ausencia de Tom Cruise no pasó desapercibida. Según In Touch Weekly, este desaire ha intensificado las especulaciones sobre la relación fracturada entre Tom y Suri.
Una fuente cercana reveló que la decisión de Cruise de perderse la graduación de su hija para asistir al concierto de Taylor Swift es un reflejo de la tensa relación entre ambos. “Estaba intercambiando pulseras de la amistad con superfans y bailando ‘Shake It Off’ entre una multitud de jóvenes de la edad de su hija”, contó la fuente. Esta actitud, contrastada con su ausencia en un día tan importante, ha llevado a muchos a pensar que Cruise lleva una “doble vida”.
La misma fuente agregó que Tom Cruise no ha visto a Suri en los últimos 11 años: “La verdad es que desde hace 11 años, Tom ha decidido no ver a Suri”. Esta separación parece haber sido una elección deliberada por parte del actor. A pesar de su distanciamiento con Suri, Cruise mantiene una estrecha relación con sus otros dos hijos, Bella y Connor, a quienes adoptó durante su matrimonio con Nicole Kidman.
Tanto Bella como Connor son seguidores de la Cienciología, religión que ha marcado gran parte de la vida de Cruise. Tony Ortega, un experto en la fe de Tom, explicó que su principal lealtad es hacia la Cienciología y su líder David Miscavige. Ortega afirmó: “Tom ha demostrado una y otra vez que su prioridad número uno es su religión y David Miscavige”.
La influencia de la Cienciología en las relaciones familiares de Cruise ha sido tema de conversación durante años. Ortega sugirió que la exclusión de Suri podría, en última instancia, ser lo mejor para ella: “Cada vez era más evidente que Tom había cortado por completo los lazos con Suri. Y, francamente, puede que eso haya sido lo mejor para ella”.
El hecho de priorizar su fe y comunidad religiosa por encima de su hija ha llevado a una desconexión total. Elegir un concierto sobre la graduación de su única hija es una muestra pública de esa separación permanente. Para Suri, que ha crecido mayormente bajo el cuidado de su madre, esto podría significar una vida libre de los conflictos derivados de las creencias religiosas de su padre.
Katie Holmes ha sido una pieza clave en la crianza de Suri, asegurándole un entorno estable, amoroso y de apoyo. Su presencia en la ceremonia de graduación reafirma su compromiso por estar junto a su hija en cada momento importante de su vida.
En cambio, las acciones de Cruise continúan generando dudas sobre su sentido de la responsabilidad familiar y sus verdaderas prioridades. Su distanciamiento de Suri contrasta drásticamente con la relación cercana que mantiene con Bella y Connor, dejando en evidencia una clara división influenciada por su religión.
A medida que Suri sigue adelante con su vida, este distanciamiento podría brindarle claridad e independencia. Aunque la ausencia de una figura paterna como Tom Cruise es significativa, la estabilidad y el amor proporcionados por su madre parecen haberle ofrecido una sólida base emocional.
La decisión de Tom Cruise de faltar a la graduación de Suri para asistir a un concierto no hace más que subrayar el distanciamiento que existe entre padre e hija. Guiado por su compromiso con la Cienciología, sus acciones han llevado a una desconexión total con Suri, mientras sigue cultivando vínculos cercanos con sus otros hijos. Este episodio sigue reflejando la complejidad de las dinámicas familiares en el mundo de las celebridades y el peso de la devoción religiosa.