Es devastador seguir viendo cómo muchas familias se ilusionan impulsivamente de un perrito, deciden adoptarlo, y en menos de lo que nadie se imagina terminan devolviéndolo al refugio, o abandonándolo en la calle. Tal como hemos reseñado en los cientos de historias que nos llegan a Zoorprendente.

Lo hacen cuando se dan cuenta que tener una mascota implica un gran compromiso a largo plazo, que amerita dedicación, paciencia, y por supuesto, reestructurar su rutina para poder incluir al nuevo miembro de la familia.

Algunas personas se dejan llevar por la emoción del momento ignorando que es un ser que necesita educación, y mucho tiempo, al igual que lo requiere un hijo.

No se informan que cada raza tiene temperamentos diferentes y formas de drenar la energía.

Eso sí, todos necesitan de la presencia de una persona responsable para poder crecer en un ambiente sano y saludable.

Un perrito con el corazón roto le suplicó a su dueño que no lo dejara en el refugio

Cuando la realidad supera las expectativas de algunos nuevos adoptantes terminan perjudicando a los perritos, quienes inocentes no comprenden por qué de un momento a otro dejan de estar en casa para pasar sus días encerrados en una perrera.

Esto fue lo que pasó con Toto, un perrito que conmovió a las redes al suplicarle a su dueño que no lo abandonara.

Toto presentía su final y le rogaba a su dueño que no lo hiciera.

Toto tiene tan solo tres años de edad, es blanco con algunas manchas marrones en su cabeza. Está físicamente bien, al menos lo estaba antes de que su corazón se rompiera tras el abandono de su dueño.

La actitud del perrito era de confusión y súplica, parecía no entender por qué lo dejarían en el refugio si a simple vista el perrito desborda ternura.

Las súplicas del perrito no causaron ninguna emotividad en su dueño.

Su antiguo dueño decidió dejarlo en el Control Animal de Carso, Califonia, si bien no existe ningún motivo por el que alguien decida abandonar a un perrito, la razón de este hombre no tiene fundamentos sólidos.

Cuando su antiguo dueño se acercó al control animal para entregar su mascota, llevaba consigo una bolsa de alimento para perros. Alguien capturó la conmovedora escena, los perritos no hablan pero el mensaje de Toto era claro:

«Por favor, no me abandones”.

La justificación del dueño para abandonar a Toto es que era «demasiado ruidoso»

El perrito se ponía en dos patitas sobre las piernas de su dueño con ojitos de ruego para llamar la atención, pero sus súplicas fueron ignoradas.

Su antiguo dueño estaba decidido a dejarlo en el refugio. Saving Carson Shelter Dog es una organización que salva la vida de los animalitos destinados al sacrificio, cuando supieron de Toto no dudaron en brindarle todo su apoyo:

“Fue muy difícil ver a Toto, porque era como si supiera exactamente lo que estaba pasando, después de que apagaron la cámara continuó intentando subir a la pierna de su papá rogándole que no lo hiciera”.

El personal del refugio estaba conmovido por la historia de Toto, estaban decididos a encontrarle un nuevo hogar; esta vez, con personas que aceptaran sus ladridos y su tierna forma de conquistar nuevos espacios.

A través de las redes informaron que el perrito estaba en adopción y solo deseaba ser amado.

«Mi antigua familia que me poseía por más de un año tuvo que renunciar porque pensaban que era demasiado ruidoso. Pero dijeron que pasé la mayor parte del tiempo en casa. Parece que soy bueno con los niños pequeños», escribió el refugio.

Afortunadamente, no pasó mucho tiempo para que este dulce perrito conquistara el corazón de una nueva familia. Hoy día, esta pequeña y adorable bola de pelos disfruta de un nuevo hogar donde puede hacer todo el ruido que quiera y correr libremente por toda la casa.

Su historia nos recuerda que adoptar es un gran compromiso de amor y responsabilidad. Por favor, no lo tomes a la ligera y sé consciente que le estas diciendo sí a un perrito que espera ser amado por el resto de su vida.

Concientizar al mundo sobre el compromiso de tener una mascota y entender que ellos merecen ser amados sobre todas las cosas, es tarea de todos.